En la visita ambas funcionarias intercambiaron criterios sobre los espacios alcanzados por la mujer en Nicaragua y Ecuador, con logros de equidad y seguridad en los espacios políticos, sociales, económicos y laborales que han venido conquistando con mucho esfuerzo, en la lucha por alcanzar sus reivindicaciones.

La doctora Ramos explico a la embajadora Buenaño los alcances de la Ley 779, que es producto de las convenciones internacionales que Nicaragua ha firmado con la Organización de Naciones Unidas (ONU), para aprobar leyes específicas de atención y protección a la mujer, como la Convención  de Belém do Pará.

La máxima autoridad judicial reconoció que aún con la ley, las zonas alejadas del país, por ser muy distantes, continúan con dificultades en el acceso a la justicia, por lo que evitar la impunidad de estos delitos se constituye un eje para erradicar la violencia contra la mujer nicaragüense.

La presidenta de la CSJ explicó a la embajadora de Ecuador otros logos de la administración de justicia, como la experiencia de los facilitadores judiciales, que se ha internacionalizado, hasta ganar un premio en La Haya, Holanda.

¨Gracias a Dios, Nicaragua ha asumido una política de Estado contra la violencia de género e intrafamiliar, al reglamentar mediante el decreto ejecutivo 42-2014, la Ley 779. La violencia debe ser tratada en cada comunidad del país, desde la familia, la escuela¨, manifestó la presidenta de la CSJ.

La Embajadora de Ecuador se mostró contenta de visitar ¨a una mujer extraordinaria, a la que admiro mucho¨.

¨Yo le compartí mi experiencia en el plano legislativo en Ecuador, en donde laboré como redactora de la nueva Constitución Política como vicepresidenta de la Asamblea Constituyente, elaborada bajo el gobierno del presidente Rafael Correa, una constitución garantista de derechos, de equidad, igualdad y paridad en la participación política de las mujeres¨, dijo Buenaño.

Agrego que ¨le expresé un poco mi alegría y simpatía de que el Poder Judicial en Nicaragua este manejado y dirigido por una mujer muy excepcional y capaz. Ecuador tiene un desarrollo alto de derechos de la mujer, partiendo de la Constitución del 2008, que se llama Constitución de Montecristi, en la que se garantizan, la equidad, la igualdad y la paridad de género¨. 

La doctora Alba Luz Ramos Vanegas, magistrada presidenta de la CSJ, posa junto a la doctora Aminta Buenaño Ruyel, Embajadora de la República del Ecuador en Nicaragua, en su visita de cortesía al Poder Judicial de Nicaragua.

La embajadora explicó que la constitución Ecuatoriana  contiene artículos que repudian y rechazan la violencia en contra las mujeres y garantizan que estas puedan vivir en paz¨.  Es una Constitución revolucionaria a favor de los derechos humanos,  de las mujeres y especialmente, como cosa muy particular, contiene los derechos de la naturaleza.

¨Creo que tenemos lazos de mucha importancia en materia de  cooperación, sobre todo tomando en consideración los enormes avances que hemos tenido  como países en materia de género.  Nicaragua es pionera en Centroamérica en tal sentido. Veo grandes avances, en la cooperación de forma conjunta, revisando en forma conjunta nuestras leyes, empujarnos y ver cómo avanzamos¨, concluyó la embajadora Aminta Buenaño Ruyel.