“Nosotros tenemos que ver cómo nos capacitamos cada día más, porque ustedes son los sucesores naturales en el Estado y por eso deben estar capacitados técnica y profesionalmente”, expresó el magistrado Marvin Aguilar García.

“Nosotros tenemos que ver cómo nos capacitamos cada día más, porque ustedes son los sucesores naturales en el Estado y por eso deben estar capacitados técnica y profesionalmente”, expresó el magistrado Aguilar García.

Ese es un tema que nosotros discutimos aquí en la Corte Suprema de cómo preparamos profesionalmente a todos los trabajadores del Poder Judicial y por eso inventamos una escuela sindical donde ya comenzamos a impartir postgrado y maestrías en su trabajo profesional, explicó.

“La Unión Nacional de Empleados debe buscar cómo desarrollar la capacitación profesional, porque tenemos que brindar un conocimiento profesional y muy humano a los usuarios del Estado”, sostuvo el alto funcionario judicial.

Ustedes están para fortalecer el Estado, para fortalecer la gestión y que el trabajo salga bien. Por eso es necesario que se preparen bien, reiteró.

“El Instituto de Altos Estudios Judiciales está la orden de la Unión Nacional de Empleados para apoyarlos en la capacitación profesional”, expresó el magistrado vicepresidente de la CSJ, doctor Marvin Aguilar García.

“El papel de los trabajadores del Estado es trabajar con eficiencia y atender con calidez y calidad a los usuarios de los servicios del Estado para que se vayan satisfecho”, afirmó el magistrado vicepresidente.

“Brindarle satisfacción a los usuarios de los servicios del Estado no es difícil. Lo importante es darle siempre una respuesta y conducirlo hacia donde le van a dar esa respuesta, para que tengamos cada día más un Estado organizado y más comprometido con el usuario”, aseguró.

“No podemos olvidar que nosotros nos debemos al usuario. Estamos para servir y por tanto tenemos que desarrollar vocación de servir”, afirmó el doctor Aguilar García.

El que no tiene vocación de servir no  puede ser funcionario del Estado. La prepotencia y la arrogancia hay que dejarla en la calle o enterrarla en el patio, porque esas son también formas de corrupción, acotó.

“Tenemos que ser en primer lugar líder en nuestras instituciones de la paciencia, la tolerancia, del buen trato al usuario y de la calidad profesional para ejercer nuestro cargo”, finalizó el vicepresidente de la Suprema Corte, doctor Marvin Aguilar García.