Escrito por Edwin Lenin Urbina Muñoz

* Los procesados que esperaban juicio en las celdas del sótano, fueron evacuados de inmediato al patio sur occidental del complejo judicial.

El sismo de 2.7 en la escala abierta de Richter registrado este viernes a las 10:40 de la mañana, convirtió en real lo que hasta hacía treinta minutos había sido un simple ejercicio de evacuación del Complejo Judicial Central Managua.

La preferencia hacia adultos mayores y discapacitados fue notoria en el adiestramiento de evacuación.

El simulacro de evacuación inició a las 9 y 20 de la mañana y se realizó en el tiempo record de cuatro minutos.

El orden y la calma de las casi dos mil personas –entre usuarios y funcionarios del CJCM— que en ese momento se encontraban en el edificio, fueron la tónica durante el ejercicio que demostró la capacidad organizativa y de concientización del Comité de Emergencia institucional.

Inmediatamente después que sonó la alarma, los integrantes de las tres brigadas de emergencia constituidas en el complejo judicial, se desplegaron por todo el edificio junto al comité institucional, para dirigir la evacuación de funcionarios, trabajadores y usuarios.

Lic. Nalia Úbeda Obando, defensora pública de la unidad especializada en Violencia.

Una brigada especial se destinó al sótano del edificio, donde se encuentran las cárceles que alojan temporalmente a los procesados que son llevados a los diversos juicios y audiencias. Los prisioneros fueron evacuados de inmediato al patio sur occidental del complejo judicial, vigilados por custodios del Sistema Penitenciario y la Policía Nacional. 

En el tercer piso, donde están ubicados los despachos de las y los magistrados de las cuatro salas del TAM, no hubo resistencia de parte de los funcionarios y empleados, quienes descendieron por las escaleras de manera ordenada.

Serenidad y disciplina

Lic. Maria de los Ángeles Mendoza, fiscal auxiliar.

La disciplina y la serenidad también fueron observadas en el segundo piso, evacuado diligentemente por sus ocupantes, guiados por las brigadas de evacuación. Lo mismo ocurrió en el primer piso, donde se realizan las audiencias y juicios; estas fueron inmediatamente suspendidas por los judiciales para cumplir con el adiestramiento.

La actitud de los usuarios del primer piso y de la planta baja fue muy participativa, todas y todos acataron las orientaciones de las brigadas de evacuación. En las escaleras de emergencia, la preferencia y el respeto a los adultos mayores y discapacitados fue notoria, puesto que no hubo empujones y prevalecía la calma.

En la fuente junto a la plazoleta, un nutrido grupo de usuarios y trabajadores del CJCM esperan la orden de reingreso.

El ejercicio fue considerado por los participantes como oportuno y necesario para salvaguardar la vida de todos los trabajadores y usuarios. “Este ejercicio es muy importante, ya que los fiscales sabremos por donde salir y conocer los puntos de seguridad a la hora de un temblor o terremoto”, expresó la fiscal auxiliar Maria de los Ángeles Mendoza.

La representante del Ministerio Público destacó el grado de organización de las brigadas de evacuación, que “en todo momento estuvieron dirigiendo al público hacia las salidas de emergencia”.

La licenciada Nalia Úbeda Obando, defensora pública de la unidad especializada en Violencia, expresó que “el ejercicio es útil, puesto que no se ha levantado la alerta roja y debemos estar preparados para evacuar el edificio”.

“Es necesario saber por dónde y cómo debemos salir a la hora de una emergencia, por eso las prácticas son muy importantes. Los agentes de seguridad guiaron a las personas y mantuvieron el orden”, destacó la joven defensora pública. 

Pese al alto grado de participación de la mayoría, no faltaron quienes de manera irresponsable no tomaron con tanta seriedad el ejercicio, pues al momento de la evacuación descendían con celulares en mano en pleno “chateo”.  

Luego de evacuados todos y cada uno de los pisos del edificio y pasado unos 10 minutos, las autoridades ordenaron primero el reingreso de los empleados a sus respectivos puestos de trabajo y después el acceso de los usuarios.  
 

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