“Los juzgados funcionaban debajo de los tambos. Sin embargo, eso quedó atrás; ahora la Corte Suprema construye edificios modernos en todo el país”, dijo el funcionario.

Agregó que “cuando comenzamos aquí era un juzgado para toda la región, no existía Tribunal de apelaciones, no había Registro de la Propiedad. Había un solo juzgado de Distrito, que atendía todo desde aquí a Mulukukú”.

 

“Hoy cumplimos 20 años de la creación del Tribunal de Apelaciones del Caribe Norte y puedo afirmar sin temor a equivocarme que se trata de un tribunal que cambió la forma de administrar  justicia en esta región”, afirmó.

 

El magistrado Chang recordó que antes de la creación del tribunal, una apelación se tenía que ir hasta Matagalpa y en esos tiempos ir a esa ciudad significaba pagar boleto de avión, porque no existían carreteras como las que ahora se han construido.

 

Además, agregó, “para inscribir nuestras propiedades lo hacíamos en la ciudad de Bluefields. Eso era prácticamente una negación a los caribeños del norte. Los habitantes de  Bilwi y las comunidades tenían que ir hasta Matagalpa y no los atendían en su idioma. Para un recurso de exhibición personal o una detención ilegal tenían que ir hasta Matagalpa”.

Manifestó que hoy en día esas gestiones se han resuelto con la instalación del Tribunal de Apelaciones. Las personas pueden venir a este Tribunal y es más accesible, más sencillo y más expedito, obviamente con la modernización que ha traído el nuevo modelo de gestión de despachos judiciales.

 

Inicialmente el tribunal estaba integrado por 5 magistrados y solo uno era de la Costa Caribe. “Hoy somos 6 magistrados, 4 originarios de la Costa Caribe, lo que significa el reconocimiento y la restitución de los derechos a los profesionales de la Costa Caribe”. 

 

Florencia Masis Smith, tiene 20 años de laborar como asistente de la  secretaría de la Sala Penal, junto a Thelma Saballos Osorno, asistente de la secretaría de la Sala Civil. Ambas son fundadoras de este tribunal. 

 

Thelma Saballos recordó que cuando iniciaron les tocaba redactar las sentencias en máquinas de escribir Olympia. “Era muy duro, porque nos tocaba trabajar hasta las 7 u 8 de la noche redactando las sentencias. En ese tiempo los modelos de sentencia se trabajaban distinto, eran más largas, entonces, trabajando en máquinas mecánicas nos tocaba escribir y comenzar de nuevo si cometíamos un error, sin contar las revisiones que hacía cada magistrado”.

 

“A veces nos tocaba volver a escribir si no les parecía un considerando. Aquí vino la primera computadora para la magistrada presidenta y solo ella la usaba. Fue muchos años después que comenzamos a conocer las computadoras y la Corte Suprema modernizó el tribunal”, acotó Saballos.

 

Uno de los más grandes pasos en la modernización fue la implementación de la réplica del Modelo de Gestión de Despachos Judiciales en el Complejo Judicial de Bilwi. 

 

Para el doctor Jimmy Chang Castillo, “la implementación del nuevo modelo de Gestión de Despacho Judicial significó el fin de la retardación de justicia, que es uno de los ejes fundamentales del Plan Decenal del Poder Judicial”.

 

Explicó que “este 12 de febrero cumplimos 4 años de haber implementado el Modelo de Gestión de Despachos en el Complejo Judicial de Bilwi, somos los segundos en la réplica después de Managua”.

 

“Este modelo de gestión vino a mejorar las capacidades, el rendimiento, la productividad y también vino a visibilizarnos como región”, dijo el presidente del Tribunal de Apelaciones.