Escrito por Janelys Del Socorro Carrillo Barrios
* Jueza de Familia encontró raro que al notificar demanda de divorcio, la receptora de la cédula firmó con el mismo apellido que tiene la litigante.
Una abogada, representante legal de un hombre que solicitó el divorcio de su pareja ante un juzgado de Familia, tendrá que explicar al Consejo Nacional de Administración y Carrera Judicial de la Corte Suprema de Justicia, por qué razón suministró para la notificación de la demanda, una dirección donde la demandada no habita.
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Dra. Verónica Castro Dávila, jueza Décimo Segundo de Distrito de Familia.
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“Ante estos hallazgos que vulneran el derecho a la debida defensa de la señora, provocando de manera maliciosa la indefensión de la misma, violentando las reglas de la buena fe, desacatando las normas éticas y de respeto a las partes, al proceso y a esta judicial, de conformidad con el artículo 95 del CPCN, infórmese del actuar de la abogada (…) al Consejo Nacional de Administración y Carrera Judicial, para que proceda en la forma que en derecho corresponde, sin perjuicio de las responsabilidades civiles o penales que correspondan”, consigna el oficio enviado por la jueza Décimo Segundo de Distrito de Familia, doctora Verónica Castro Dávila.
Luego de corroborar de forma fehaciente la argucia cometida por la abogada, la judicial declaró la nulidad de lo actuado en el proceso, desde la notificación efectuada a las 11:12 minutos del 28 de mayo pasado, por haberse efectuado en lugar distinto al domicilio de la demandada.
En el escrito de demanda, el actor indicó como lugar para notificar a su pareja una dirección ubicada en Villa Pedro Joaquín Chamorro, donde la cédula fue recibida por una mujer que tiene el mismo apellido de la abogada que le lleva el caso a él.
Con el fin de verificar si esa dirección es la misma del domicilio de la demandada, la judicial se auxilió con una trabajadora social del Consejo Técnico Asesor, que al presentarse al lugar encontró “que la dirección registrada como dirección de la señora (…) no es su casa de habitación, sino la de los señores A.V y D.R. con los que (la demandada) no tiene ningún tipo de parentesco”.
En su informe, la trabajadora social explica que en la casa hay una oficina de leyes en donde trabaja la abogada del demandante, quien al ser consultada vía telefónica informó que ella es la representante legal de la demandada y que proporcionó su dirección en vista de que por razones laborales la demandada no permanece en su casa de habitación.
