La observancia del principio de igualdad establecido en la Constitución Política y el Código de Familia y comunicarse asertivamente, son claves para el éxito de una relación de pareja, valoró el juez Diego Arana (centro), en el programa “Una hora con la justicia”.

Así valoró el juez quinto de distrito de Familia de Managua, doctor Diego Manuel Arana Castillo, la transformación que la sociedad va experimentando frente a la institución del matrimonio. Esto se refleja en la decisión de la mayoría de las parejas de optar por la comunidad de bienes, como el régimen matrimonial que ejercerán una vez que el próximo 14 de febrero celebren su matrimonio en Ya tu Boda 2022.

El Día de San Valentín, el juez Arana Castillo, cinco jueces de Familia más y una asesora legal de la Corte Suprema de Justicia, llevarán a cabo el masivo evento promovido por la Nueva Radio Ya, que hasta la tarde de este 27 de enero contaba con la solicitud de 217 parejas deseosas de legalizar su relación.

El judicial compareció en el programa radial “Una hora con la justicia”, conducido por los doctores Roberto Larios Meléndez y María Amanda Castellón Tiffer, director de Comunicación y de Resolución alterna de conflictos, respectivamente, quienes consultaron sobre los motivos por los que mayoritariamente ocurren las separaciones de las parejas.

De acuerdo con las estadísticas de la oficina de Implantación del Tribunal de Familia, en el año 2021 los jueces de Familia de Managua realizaron 400 matrimonios en el Día de San Valentín y 47 en los juzgados, mientras que en el mismo período tramitaron 3,664 solicitudes de divorcio por voluntad de una de las partes y 396 por mutuo consentimiento.

Dr. Diego Manuel Arana, juez quinto de distrito de Familia de Managua.

Olvido conveniente
Para el doctor Arana Castillo, la causa de semejante cantidad de divorcios se da porque  “olvidamos el concepto del matrimonio; muchas parejas se casan pero quieren seguir viviendo como si fueran solteros y ese es uno de los problemas que provocan los divorcios, porque aunque el matrimonio implica un compromiso para ambos, uno de los cónyuges, generalmente el varón, quiere seguir viviendo una vida de soltero”.

Señaló que la relación de dominación se ha venido transformando y los patrones culturales han ido cambiando, pues hoy en día ambos cónyuges tienen iguales derechos y responsabilidades, tanto en la crianza como en la formación de los hijos, que antes se le dejaba a la mujer.

La doctora Castellón Tiffer señaló que el actual sistema jurídico vino a derogar todo ese  sistema patriarcal impuesto en el Código Civil, pues establecía que el domicilio de la mujer era el de su marido, sin embargo, ahora ella tiene derecho a elegir el régimen matrimonial que prefiera.

¿Va a ceder la herencia del patriarcado con los cambios que se han hecho en la ley?, preguntó el doctor Larios Meléndez al judicial, quien respondió que dependerá de los niveles de comunicación que la pareja desarrolle, porque muchas veces esta no comparte sus gustos, hábitos, valores y costumbres, por lo que al convivir chocan y desencadenan los conflictos.

“Deben ponerse de acuerdo hasta en cosas que parecen insignificantes, conversar sobre cómo van a llevar su hogar; el hombre también debe contribuir en las tareas domésticas y educar (en esa línea) a sus hijos, para ir transformando esos patrones culturales…Muchas veces damos por supuesto que nuestra pareja sabe lo que nos molesta, cuando ni siquiera  se lo hemos comunicado; y así vamos guardando disgustos, hasta que llega un día que explotamos y se causan los rompimientos”, analizó.

Finalmente, la doctora Castellón Tiffer invitó a las parejas que este 14 de febrero contraerán nupcias en el evento organizado por la Nueva Radio Ya y el Poder Judicial, a que tengan una “comunicación asertiva” para que el matrimonio sea exitoso.

El Artículo 68 del Código de Familia establece que en el acto de celebración matrimonial las personas autorizadas para realizarla, mencionarán en forma sucinta los derechos y deberes que nacen del matrimonio respecto a la pareja, así como lo relativo al respeto y solidaridad que debe existir, la responsabilidad compartida en el cuido, crianza, alimentación y representación de los hijos e hijas y les apercibirá del derecho que les asiste para elegir el régimen económico matrimonial, que estimen a bien.