El juicio se dividió en 4 sesiones realizadas en diferentes días, que fueron extendidas hasta altas horas de la noche por la cantidad de pruebas y testimonios presentados por el Ministerio Público y la PGR, que consistieron en un total de 13 peritos, 20 documentales y 22 testigos, dentro de los que se suman oficiales investigadores de la Policía Nacional.

La declaración del único sobreviviente, el joven Barraza Báez, fue crucial en el proceso y fue la pieza clave para que la Policía Nacional esclareciera los hechos con una gran prontitud.

Aparte del relato del sobreviviente se presentaron a los miembros del jurado los resultados de las pruebas periciales realizados en los dorsos de los brazos de Cruz y Ponce, los que reflejaron presencia de productos nitrados (rastros de que dispararon arma de fuego), así como también la presencia y rastros de sangre encontrados en la casa de Cruz, las manchas hemáticas en la ropa de ésta, entre otras.

Por su parte, Samuel –el único sobreviviente--, se dirigió a los miembros del jurado solicitando declararan culpables a los asesinos de su madre y su hermano, y compartió uno de los últimos momentos con su madre aún con vida, en donde ésta le acarició el pie cuando se encontraban tirados en la casa de la acusada.

La acusada Verónica Cruz Cuadra, solicitó a los miembros del jurado el veredicto de inocencia y compartió con estos que se encuentra en estado de embarazo.

¨Sé muy bien el dolor que están pasando, pero nosotros no somos culpables. Hemos pasado por maltrato, golpes, estoy embarazada y tengo a mi niña de 12 años que no la he visto. No somos culpables. Les pido que por favor nos declaren no culpables¨, expresó Cruz Cuadra a los miembros del jurado.

La pena
El Ministerio Público y la PGR solicitaron a la doctora Ruth Chamorro, jueza del juzgado de Distrito Penal de Juicio de Masaya, aplicar la pena máxima por tratarse de un delito grave. Penas que si se pudieran sumar tendrían un total de 81 años para cada uno de los acusados.

Para el acusado Maynor Ponce Urbina y Verónica Cruz Cuadra, culpable del delito de asesinato en perjuicio de Juana Yolanda Báez,  pidieron la pena máxima de 30 años; Por el asesinato de Arles Ortega Báez, 30 años. Por el delito de asesinato frustrado contra Samuel Barraza Báez, solicitaron la pena de 20 años y por tenencia ilegal de armas solicitaron la pena de un año de prisión.

La defensa de ambos acusados solicitó a la judicial aplicar la pena mínima para cada hecho y que les regresen a los familiares de sus representados las pertenencias ocupadas en el proceso de investigación.

La hija mayor de la víctima, Dayana Báez, manifestó que ¨mis hermanos y yo estamos muy satisfechos con los resultados que se dieron. Estamos muy satisfechos y estamos contentos con los resultados¨.

La lectura de la sentencia será leída el martes 3 de Diciembre a las tres de la tarde en el juzgado de Distrito de Juicio de Masaya.