La Dra. Ángela Rosa Acevedo, de la Secretaría Técnica de Género de la CSJ, sostuvo que durante el magister los jueces demostraron solidez, compromiso y convicción.

Los jueces Tercero y Cuarto de Distrito de Familia de Managua, doctores Xiomara Rivera Zamora y José Ramón Barberena Ramírez, participantes del magister, coincidieron en señalar que el conocimiento adquirido ha cambiado sensiblemente su forma de interpretar la realidad.

“Nos quitó la venda (y ahora) vemos las cosas y la realidad de las personas con lentes de género”, aseguró la jueza Rivera, tras precisar que “se trataba de cambiar la estructura de nuestro pensamiento, de interpretar la norma jurídica desde la perspectiva de género”.

Al doctor Barberena Ramírez el curso le ayudó a tomar mejor sus decisiones como juez, en cómo aplicar la perspectiva de género y la igualdad tanto en las sentencias como en los trámites y audiencias que celebra.

Gestos y machismo
“En lo social me ayudó a entender cosas que antes no comprendía, como actitudes machistas que a veces se transmiten hasta en los gestos. En lo personal fue enriquecedor, porque en la investigación que realicé me di cuenta que en la mayoría de los casos de negación de paternidad lo que incide es la infidelidad,  el no querer cumplir las obligaciones y que las mujeres nos aceptan como somos”, señaló el judicial.
 

Dra. Xiomara Rivera Zamora, jueza Tercero de Distrito de Familia de Managua.

La tesis del doctor Barberena titulada “Enfoque de género en los juicios de Investigación de Paternidad no Matrimonial en los Juzgados”, le dio la pauta para establecer que “más del 50 por ciento de las mujeres que tuvieron hijos no reconocidos sabían que estaban con un hombre comprometido, casado o en unión de hecho con otra persona”.

La jueza Rivera Zamora indicó que para ella, la maestría ha significado poder valorar las situaciones atendiendo el contexto y las circunstancias que cada persona vive.

“Siempre se ha etiquetado a las mujeres que no trabajamos porque no queremos, pero cómo hacerlo de forma remunerada cuando se tiene cuatro hijos que cuidar; que dependen sólo de ella porque el padre no comparte las labores domésticas, ahí vemos desigualdad e injusticia total que viene de la inequidad en la asunción de las responsabilidades”, observó.

Analizó que esto ocurre porque desde siempre “en nuestras casas nos enseñaron a ver las cosas desde la óptica androcéntrica, empezando por la organización del hogar en el que todo debía girar alrededor de los hombres”.

 

El Magister se realizó mediante encuentros presenciales, no presenciales y estudio para un total de 200 horas, más la elaboración de una tesis.

La coordinadora de la Secretaría Técnica de Género de la Corte Suprema de Justicia, doctora Ángela Rosa Acevedo, valoró que “más que una teoría muy consistente y elaborada, el Magister constituyó una oportunidad para ver cómo hemos generado y sufrido violencia”.

Adelantó que todos los jueces destacaron en sus notas y se prevé que recibirán su titulo durante la graduación prevista para  septiembre próximo.

“Sé que algunas investigaciones serán publicadas, ya que las maestras se quedaron maravilladas de ver cómo construyeron su tesis con base en su propia aplicación de vida, hasta llegar a una construcción social; están encantadas porque hay tesinas que son una joya”, señaló.