La wihta Yahaira Vanesa Rivera se destaca como la vice presidenta de la junta directiva de los wihtas del Caribe Norte.

Saberio Panting, presidente de los wihtas del Caribe Norte, explica que el wihta es una figura elegida para impartir justicia en un barrio o en una comunidad indígena  y  por tradición era una figura con ciertas características como ser un hombre grande y fuerte físicamente y tener el visto bueno del Consejo de Ancianos, que también eran hombres y  por lo tanto las mujeres no podían acceder a esa responsabilidad.

“El argumento del por qué no se elegía a una mujer como wihta era porque habían delincuentes peligrosos que las podían agredir o matar, pero el motivo  más fuerte era que los maridos no aceptaban ya que se deben hacer patrullajes nocturnos con la policía y no les parecía que sus esposas se integraran a esta labor, que es de mucho sacrificio y desvelos”,  recordó  don Saberio.

Reflexionó, “no les gustaba que  las esposas salieran de noche de su casas y tampoco les parecía que ellas ejercieran autoridad en el barrio y la comunidad, porque mediar con los comunitarios estaba destinado únicamente  a los hombres”.

Yahaira Vanesa Rivera, primera wihta del barrio Waulalaya de reciente creación en Bilwi, tiene 32 años de edad y cinco de ejercer ese cargo, en la actualidad es la vicepresidenta de la junta directiva de los wihtas del Caribe Norte y la primera mujer que se destaca impartiendo justicia comunitaria.

El señor Saberio Panting, presidente de los Wihtas del Caribe Norte reconoce el avance de las mujeres en la administración de la justicia comunitaria.

“No es fácil ser wihta mujer, estamos rompiendo esquemas y abriendo camino para que cada día se elijan más mujeres como wihtas. Los barrios y comunidades ahora entienden que las mujeres también somos lideresas y sabemos administrar justicia y con nuestro trabajo disminuimos la violencia, porque tenemos sabiduría y carácter para mediar y lograr la paz entre nuestros vecinos”, dijo la líder comunal  quien tiene 2 hijos varones y 4 mujeres.

Chismes y brujerías
La wihta explica que el año pasado atendió 398 casos que “de no atenderse  hubieran provocados problemas y quitado la tranquilidad al barrio,  nosotros lo que hacemos es buscarle una salida para que todos se vayan en paz y no existan diferencias”.
Agregó, “las intervenciones de nosotras pueden ser por deudas, chismes, brujerías, lesiones leves, denuncias de violencia intrafamiliar, que en esos casos las remitimos a la instancia competente. Por lo general como castigo o sanción mandamos a realizar trabajos comunales y las personas respetan nuestras decisiones y nos buscan para darle salidas a los conflictos”.

Yahaira aseguró que “este espacio lo hemos logrado porque ahora somos protagonistas y como mujeres somos excelentes mediadoras porque  tratamos que las partes salgan favorecidas, para que no existan peleas ni malos entendidos y lo más importante es que llevamos la paz y el amor a nuestros barrios”.

El Dr. Jimmy Chang Castillo, presidente del Tribunal de Apelaciones de Puerto Cabezas, reconoció el trabajo de la wihta Yahaira Vanesa Rivera, quien recibió un incentivo de la mano del Dr.  Elías Santana Gallo, juez Local Penal de Bilwi.

Con mucho orgullo, la jueza comunitaria dice: “hemos logrado que nuestras actuaciones sean válidas al igual que la de los hombres wihtas. Cada día estamos ganando espacio, de 48 wihtas somos 6 mujeres al frente de los barrios más vulnerables y desde estas responsabilidades podemos promover la participación de la mujer en los espacios comunales”.

La jueza destacó las capacitaciones impartidas por el Poder Judicial sobre la mediación y las coordinaciones con instituciones relativas a la administración de la  justicia comunitaria. En los últimos años las mujeres de la Costa Caribe Norte, principalmente de Waspam y Bilwi, han ganado espacios destinados a hombres. Hoy son Wihtas, presidentas territoriales, alcaldesas, juezas, magistradas, concejalas, presidentas del Consejo Regional y síndicas (persona que administra los recursos naturales de su comunidad).