Las hijas mayor y menor se fundieron en un abrazo con la comerciante, quien prometió asumir las responsabilidades que le corresponden respecto a su manutención y desarrollo.

Después de dos años de haber dejado el hogar y en plena audiencia judicial, una mujer pidió perdón a sus cuatro hijas y al padre de éstas, reconociendo ante su primogénita que todas están bien gracias a que ella (la hija mayor) asumió el rol de madre, sin abandonar sus estudios de Veterinaria.

En palabras de la jueza noveno de distrito de Familia, doctora María de los Ángeles Soza, la mujer desapareció por dos años “debido a una mala comunicación y un conflicto no resuelto” (entre la pareja). No obstante, valoró que ahora lo más importante es que “ella dio el primer paso, al pedir perdón por haberse ausentado de la vida de sus hijas y acceder a que el padre conserve su cuido y crianza”.

Minor Ricardo Jiménez García interpuso la demanda de divorcio contra su pareja, pero en el desarrollo de la audiencia, tanto la judicial como las abogadas de las partes, les hicieron ver las ventajas que tendría el hecho de limar asperezas y empezar “de cero” por el bien de sus hijas y ellos mismos.

El resultado fue la firma de un acuerdo, en el que la mujer se compromete a entregar una pensión de alimentos del 50 por ciento de sus ingresos para sus hijas, en base a la tabla de salario mínimo sector personal, dinero que depositará los días 16 de cada mes a partir de febrero en la caja del Ministerio de la Familia.

“Nosotros lo que hacemos es unir familias con el respaldo de las abogadas y representantes legales…pedir disculpas es de humanos”, reflexionó la judicial, al explicar que durante la audiencia, instó a la pareja a aprovechar el momento y que quien lo tuviera a bien, ofreciera disculpas, invitara a borrar el pasado y recuperar el tiempo perdido con las hijas debido al distanciamiento.

Conciliación
Fue así que la joven mujer se puso de pie y mirando al padre de sus hijas pidió perdón por lo ocurrido y prometió que no volverá a ausentarse de las vidas de éstas, porque “uno sin los hijos no es nada”. Después abrazó a su hija mayor y viéndola a los ojos le dijo: “Esto no volverá a pasar”.

El guarda de seguridad Minor Ricardo Jiménez García, aceptó las disculpas que la madre de sus hijas le presentó dos años después de haber abandonado el hogar.

“Esta experiencia me ha enseñado que uno de los errores aprende…Yo le agradezco a ella (la hija de 19 años) que hizo mi papel; ella no tenía por qué hacerlo, esa es responsabilidad de nosotros (los padres), las niñas están bien gracias a ella, pero es claro que un niño no puede cuidar a otro niño”, sostuvo la mujer que se dedica al comercio.

Por su parte, el señor Jiménez García, dijo que si bien durante la audiencia hubo lágrimas, estas fueron de felicidad, porque el reencuentro fue “algo muy bonito y no pensamos que terminaría así… Si las parejas que se separan actuaran de esta manera (reconociendo desaciertos), el mundo sería feliz y no llegaríamos a la violencia”.

Para él, el apoyo de su hija mayor fue vital en estos dos años, ya que desde los 17 y a pesar de su responsabilidad con la universidad, veló por sus hermanas, las cuidó y protegió cada noche, ya que su trabajo de guarda de seguridad lo obliga a permanecer fuera del hogar para poder llevar el sustento a la familia.

El acuerdo suscrito entre los progenitores contempla que la mujer asumirá el 50 por ciento de los gastos de educación y salud que no sean cubiertos por el sistema de salud pública o el seguro social, así como el costo de vestimenta completa valorada en mil córdobas para cada una para sus cuatro hijas, en los meses de junio y diciembre de cada año.

María Nidia Hernández Delgado, representante del demandante, externó que lo ocurrido durante la audiencia constituye “un ejemplo para otras personas” que se divorcian y agregó que como litigantes, el objetivo que todos deberían seguir es el de unir familias, pues en su caso, en todos los procesos que lleva siempre procura mediar para lograr que las partes lleguen a un arreglo satisfactorio. “Aquí pasó algo muy especial y eso me satisface”, dijo.