Escrito por Janelys Del Socorro Carrillo Barrios
* Presidenta de la CSJ exalta impacto positivo del primer curso especializado entre jueces de Familia y de Violencia.
El mejoramiento de las competencias teóricas y prácticas materializado en el abordaje de enfoques diversos desde las ciencias del Derecho, la antropología y psicología, es la razón por la que la Corte Suprema de Justicia decidió reeditar el magister con enfoque de género para los jueces de Nicaragua.
Así lo anunció la magistrada presidenta del Poder Judicial, doctora Alba Luz Ramos Vanegas, durante la clausura del año lectivo del “Magíster Derecho y Desarrollo Humano desde la Perspectiva de Género”, realizada el pasado 28 de febrero.
Agregó que cuando la CSJ decidió impartir el magister, lo hizo con la convicción de que era necesaria una formación desde la perspectiva de género estructurada y sistemática, como establece la Ley 779, que dispone la especialización de las y los funcionarios, así como la aplicación del enfoque de género en la formación continua que establece la Política de Género del Poder Judicial.
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La magistrada Ligia Molina Argüello entrega un reconocimiento a Roxana Volio, coordinadora metodológica del magíster.
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Hace ocho meses, 36 jueces de Familia, de Violencia y médicos forenses del Instituto de Medicina Legal, iniciaron el curso especializado que este 28 de febrero llegó a su fin. Este mismo día, la doctora Ramos Vanegas dijo que “desde hace meses venimos trabajando y tocando puertas para la consecución de fondos que nos permitan poder iniciar esta segunda fase”.
“Tenemos el reto de hacer posible una segunda edición de este magíster para preparar a otro grupo de funcionarios y funcionarias que mejoren sus capacidades y por ende el acceso a la justicia de la ciudadanía”, dijo la magistrada Ramos Vanegas.
Patriarcado, desigualdad y violencia
El reto (ahora) es evaluar periódicamente cómo estos conocimientos teórico-prácticos logran tomar vida en sus sentencias, actuaciones y comportamientos, para que redunden en protección efectiva de los derechos de mujeres, niñas y niños, planteó la magistrada presidenta.
Aseguró que la novedad de este aprendizaje es la complementariedad que los participantes aplicaron mediante talleres vivenciales de autoconocimiento para el cambio, los vínculos y las relaciones, el manejo de las crisis, los duelos y el estrés.
Asimismo, precisó que gracias al curso, cada discente experimentó a través de las técnicas utilizadas, cómo la construcción genérica en el caso de los varones les ha negado expresar sus emociones, conocer el lenguaje corporal y experimentar que para vivir y ser felices no necesitan ser machos.
Señaló que al estudiar el patriarcado, han comprendido que en su esencia están las relaciones desiguales de poder, una de las causas de la violencia contra las mujeres y cómo la violencia es vivida desde instituciones como la familia, la escuela, las religiones, las ciencias y el Derecho, las que han servido para mantener y reproducir el estatus de inferioridad de las mujeres.
La magistrada Ramos resaltó el apoyo del Instituto de Derecho Público de la Universidad Rey Juan Carlos; de José Manuel Mariscal y Blanca Yañez, de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), que financió el Proyecto “Apoyo a la implementación y ejecución de la Ley Integral Contra la violencia hacia las mujeres de la CSJ y el Ministerio Publico”.
Asimismo, aplaudió y agradeció la entrega del cuerpo docente integrado por Roxana Volio, coordinadora metodológica del magíster; Alda Facio Montejo, Ana de Miguel Alvarez, Laura Nuño, Roxana Arroyo, Dina Josefina Ochoa, Mercedes Ruiz Garijo, Fernando Huerta, María Martínez de la Colina y la docente nacional Patricia Delgado.
En el evento participaron las magistradas de la CSJ, doctoras Ligia Molina Argüello, Yadira Centeno González y Juana Méndez Pérez.
