Durante la audiencia oral, la señora Carolina Herrera planteó de viva voz sus pretensiones al juez José Ramón Barberena Ramírez, quien resolvió la ejecución provisional de una sentencia de relaciones padre, madre, hijos.

Las primeras dos audiencias orales celebradas tras la entrada en vigencia del Código de Familia, correspondían a una ejecución de título judicial radicada en el Juzgado Cuarto de Distrito y un divorcio por mutuo consentimiento sometido a conocimiento del juzgado Tercero Local.

La primera audiencia se celebró a las ocho de la mañana y tuvo una duración de cuarenta minutos, al cabo de los cuales el juez José Ramón Barberena Ramírez ordenó que la señora Carolina Herrera se reuniera con su niña en las instalaciones del Ministerio de Familia Niñez y Adolescencia.

El presidente del Tribunal de Apelaciones de Managua, doctor Gerardo Rodríguez Olivas, quien asistió a las audiencias para observar su desarrollo, dijo que la celeridad con que se tramitaron ambos casos, constituye una de las bondades del nuevo estatuto de Familia.

Estimó que si bien algunos abogados tienen ciertas dificultades, como invocar leyes derogadas para demandar justicia, hay que tomar en cuenta que este fue el primer ejercicio que se hace en materia de Familia (pero) “con el tiempo se tiene que ir mejorando, (pues) todavía estamos apegados al sistema viejo”.

Usuarios satisfechos
 

El ejemplo de esta pareja que se divorció de forma amigable y en todo momento mostró preocupación porque las necesidades de sus hijos estén plenamente satisfechas fue aplaudido por las autoridades en el Tribunal de Familia.

Carolina Herrera, Sebastián Roger Marenco Montenegro y Marjorie del Carmen Chávez Manzanares, todos protagonistas de las audiencias celebradas por las dos judicaturas, reconocieron la celeridad con que se le dio respuesta a sus respectivas demandas.

En el caso de la señora Herrera, quien demandó la ejecución de la sentencia que le permite relacionarse con su hija, la medida dictada por el juez Barberena Ramírez fue la ejecución provisional que esa misma tarde le permitió visitar a su niña bajo la supervisión del MIFAN.

“Se tomaron las decisiones que correspondían, mandé a subsanar lo pertinente y por eso admití la ejecución de sentencia de forma provisional, en virtud que se mandó a valoración sicológica forense a la demandante”, explicó el doctor Barberena.

“Pienso que el proceso es rápido pero al pedir al juez un diagnóstico del Instituto de Medicina Legal, el abogado defensor está usando tácticas dilatorias. Sin embargo, después de cinco meses  a partir de hoy voy a ver a mi hija de dos a seis de la tarde, dijo Herrera.

Sebastián Róger Marenco Montenegro, de oficio taxista y Marjorie del Carmen Chávez Manzanares, quienes se divorciaron de forma amistosa tras diez años de matrimonio, reconocieron que ahora los trámites judiciales son más rápidos y “no hay que esperar tanto como antes”.

A eso de las diez de la mañana, la ex pareja ventiló los términos de su separación ante la jueza Marlene Zamora Zepeda, y horas más tarde ésta dio lectura a la sentencia que certifica el divorcio pero garantiza el bienestar de los dos hijos que procreó.

La procuradora nacional de Familia, licenciada Janeth de Concepción García Ortiz, felicitó a los ex esposos por la forma cívica en que pusieron término a su relación y les aconsejó que continúen en esa línea en aras de una crianza y desarrollo sano de los niños.

En el caso de la señora Herrera, la procuradora y la representante del MIFAN, Fernanda García Moreno, plantearon sus consideraciones al juez Barberena Ramírez privilegiando el interés superior de la niña de relacionarse con su madre.